Me gustaría comenzar el artículo comentando algo que ya he dicho con anterioridad: el que descubrió el storytelling, no descubrió Amercia, descubrió cómo somos las personas. Porque, queridos amigos, el marketing es la conexión entre personas. Una vez dicho esto, centrémonos en lo importante: los cuentos del siglo XXI.
Los humanos somos así oye, nos chiflan los cuentos. Cuando todavía somos pequeños seres ingenuos vamos por la vida flipando con cualquier cuento chino que cualquier persona (enserio cualquiera) nos cuenta. Y desde ese momento hasta el fin, estamos llenos de historias: antes de dormir, en el colegio, películas, series, libros, la historia que te cuenta tu madre explicándote lo que te va a pasar como sigas así, las del abuelo -que están fuera de contexto pero oye, que molan igual-, las que él le cuenta a ella cuando llega 4 horas más tarde de lo previsto o las que ella le cuenta a él tras juntarse con viejas amigas. Todas y cada una de las cenas familiares se resumen contando las mismas historias que han vivido los miembros de la misma..¿necesitamos excusas? Sacamos nuestro lado creativo. Los mismo pasa cuando cuentas las vacaciones. Yo creo que la gente goza más contándolo que viviéndolo. Por eso hemos creado las redes sociales.
¿Por qué nos pasa esto? Porque una historia es una forma perfecta para conectar. Hablamos de nuestras experiencias, las compartimos, nos abrimos ante el otro interlocutor. La otra persona, puede que se sienta identificada, emocionada, feliz… Va a reaccionar al estímulo. Puede identificarse o bien porque ha estado en el mismo sitio o bien porque en otro momento de su vida ha vivido la misma sensación que el sujeto uno. También puede que no se sienta identificado en absoluto, pero aun así consigues su atención y le entretienes. Siempre, siempre, siempre hay una reacción. Y voila! Una historia hace que dos personas se entiendan, se comprendan y compartan.
Muchos de vosotros os preguntaréis qué tendrá que ver esto con el marketing. Allá voy… No es lo mismo que una empresa te venda pechuga de pollo, que ver un vídeo en Facebook sobre esa misma empresa contándote cómo el ave se ha criado el libertad, procede de Castilla y León, ha seguido una dieta perfecta, la temperatura era buena y la gallina se llamaba Aurora. No lo es.
El ejemplo perfecto para esto es la empresa BeCiclos. No venden bicicletas, el cliente las adopta. Son bicicletas que han sido abandonadas y son ellos los que las sacan de las calles. Después, un apuesto mecánico de confianza las arregla y las pone a punto. Cambia todo lo necesario para poder darle una segunda oportunidad a la bicicleta. Tras el proceso, el cliente debe de rellenar los papeles de adopción haciéndose cargo de la bicicleta. Todas ellas tienen detalles únicos y nombres propios. No hay dos iguales. Cada una tiene su propia historia. Y por ello publican en Facebook tanto sus anécdotas como las de sus compradores. Nos hacen saber cómo se han cruzado la vida del comprador y la del producto. Fantástico. Magnífico. Chapea!. Yo le doy un diez. Y al igual que yo todos y cada uno de los clientes que han tenido desde que lanzaron la iniciativa.
Otra de las mayores referentes a nivel nacional es La Forte. Tiene muy claras las ventajas del Storytelling y , además, posee la gran capacidad de contar historias de una forma única, con gancho. ¿Sabéis? De eso que te pones a leer uno de sus textos en Instagram y se te acaba escapando un like en la foto nº 1308023952. (@soylaforte). Tiene el don de la palabra, chispa, gracia,… No es recomendable leerla en el transporte público porque puede que se te escapen carcajadas y claro, haces el ridículo. Enserio, es capaz de escribir el discurso de un presidente, una reunión de trabajo o la propia biblia de forma lúdica. Y señores y señoras que estáis al otro lado de la pantalla, eso es lo que ahora mismo está buscando el público. Que lo entretengan. Para eso vamos a las redes sociales, para que nos cuenten historias, sí, pero divertidas. Que para las tragedias ya está el telediario. Nos gusta que nos hagan reír… ¿por qué si no hemos creado tantos canales del rollo Cabronazi? Y todos conocéis Cabronazi.
Con el storytelling las marcas han conseguido que el público les preste atención, y mucha. Han conseguido la empatía de su cliente y les resulta mucho más fácil conectar con las nuevas tribus de consumidores de las que también hemos hablado.
Poner esta práctica en marcha te diferencia de las marcas que no lo hacen por los siguientes motivos:
- Confían en ti, porque tú les has enseñado ese lado tierno (por decir algo) que ellos desconocían.
- Va a serte fiel. Después de conectar contigo, no va a querer irse con otra.
- Te va a recordar (y de forma tierna o al menos positiva). Si la historia es buena claro. Si le vienes con el cuento de los tres cerditos igual te bloquea.
- Hablará de ti. Si esa historia que le has contado le ha llegado, créeme que a la hora del café comentará lo que ha visto esa mañana en Instagram. Y ya no será solo un simple “like”, es una embajadora de tu marca.
- La conexión es fuerte, debido que se ha hecho de forma emocional, y esto crea apego.
Ahora mismo debes estar pensando cómo empezar a contar tu historia ¿cierto? Déjame darte pequeñas claves de éxito que a otros les han funcionado.
Hay que tener esa figura de líder inspirador. Cuéntales cómo empezaste y lo que conseguiste con esfuerzo, sacrificio y constancia. Cuéntales cómo sacaste lo mejor de ti e impúlsales a que saquen lo mejor de ellos.
Es muy importante contar los pequeños detalles, no limitarte únicamente a las acciones. Se descriptivo. El hecho de que les des la dirección del primer taller, el nombre del bar dónde ibas a robar Wifi o cómo se llamaba el amigo al que timaste para que te dejase algo de dinero para comenzar tu negocio, donará credibilidad a la historia.
Por otro lado, en el storytelling hay que tener muy en cuenta a esas personas que quieren saberlo todo todito todo. ¿Qué pasa en el backstage? Sí, tus fotos de insta son preciosas. Pero, ¿Qué cara tienes el lunes por la mañana? Para ello, a día de hoy tenemos Apps geniales que nos acercan al cliente, y nos siguen como si fuéramos un amigo más, Snapchat e Instagram Stories. Así satisfacemos sus necesidades cotillas y pasas a ser parte de su día a día.
Finalmente, otra de las acciones que suele funcionar es hablar también del futuro. Tu pasado está muy bien, pero ¿quién quiere llegar a ser? Si les dices que quieres dominar el mundo puede que también opten por bloquearte, pero si tu misión es crear un impacto en el mercado con nuevas iniciativas de economía colaborativa y dar pasos hacia la igualdad, habrás entrado en el corazoncito de muchos clientes.
Ejemplifiquemos ¿vale? Sé que antes ya lo he hecho, pero es que no lo puedo evitar. Soy un poco spoiler y siempre acabo arruinando o destripando el final.
He aquí un magnífico ANUNCIO de Storytelling. Estaréis pensando por qué soy tan tolai de escribir “anuncio” en mayúsculas. Cuando lo vi, por un momento pensé que era una película.
https://www.youtube.com/watch?v=3ap24Pl3__w
Mi último ejemplo de hoy es Eith & Bob, sí, la marca de perfumes. Esa marca ha vivido una historia digna de convertirse en película con el nombre de los mejores actores de Hollywood. Y no, no exagero. Aquí os dejo el enlace para que os deleitéis vosotros mismos. Yo me enamoré. <3
http://www.hannover1998.com/9879_eightbob
Una vez dicho esto… ¿cuál es tu historia? ¿cuáles son esas anecdotas que hasta ahora te has guardado para ti? ¿Qué haces en tu día a día? ¿Cuál es tu vision de futuro?
Cuentame un cuento y verás que contento…