Muchas veces he escuchado la frase de…” soy responsable de lo que digo, no de lo que tú interpretas” ¡qué bien suena! ¿Qué no? Vale, pues para el mundo de la empresa no vale. Si tienes una marca, tienes que tener mucho cuidadito con todo. Y siempre vas a ser el responsable de lo que digas, de lo que interpreten, de lo que piensen y sientas tus clientes… Siempre. Así que hazlo bien.
Bueno ahora que ya sabéis cómo no hay que hacerlo vamos con los diez mandamientos que llevándolos a raja tabla, te harán tener una envidiable relación con tus queridos clientes.
Amarás al cliente sobre todas las cosas:
Hay que decirlo y hay que hacerlo. Sin excepción. Tenemos que tener al cliente en cuenta, ser 100% empáticos con él. Y si se puede un 120% también. Hay que saber escucharle para saber darle lo que quiere. Y escuchar para entender, no vale escuchar para responder y salirte de rositas. En esta relación, como en el matrimonio, puedes elegir entre tener razón o ser feliz. Yo lo tendría claro.
Santificarás la coherencia:
No seas demasiado optimista para tenerle contento, ni a la primera de cambio prometas cosas que no sabes si cumplirás o no. A todos nos gusta el postureo, pero hasta este tiene sus límites. Si das una falsa imagen de ti, tus capacidades, tu empresa… Perderás toda credibilidad. Cree en ti, amate, y muéstrate tal y como eres ante tu cliente. Sé coherente entre lo que dices y lo que haces. Se transparente.
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No tomarás al cliente en vano:
No ignores al cliente, ni le hagas sentir mal, ni se te ocurra dejar de ser agradecido con él, y sobre todo, no le quites el derecho a expresarse, por poco que te guste lo que dice. Aunque sea una crítica sin fondo ni razonamiento. Es tu cliente, y tienes que saber tratar con él. Suena obvio ¿verdad? Pues preguntarle a Nestlé a ver qué tal le fue… Sí sí, habéis leído bien Nestlé.
No cometerás actos impuros:
No bajes las expectativas del cliente. Tenemos que ser honestos, fieles. Si por ejemplo, sabes que un paquete va a llegar tarde, díselo. Que salga de ti el admitir que va a tardar 24h más. Si él pasa todo el día esperando, y no le llega, se frustra. Te llamará a ti para culparte, y si en ese momento tú echas los balones fuera diciendo que ha sido la empresa de transporte, seguramente cambiará su visión de la empresa, de la marca y de ti. No cuesta nada ser transparente, y normalmente, no solemos enfadarnos con la gente que nos dice la verdad.
Los atraerás a tu reino:
Una vez que ya te han hecho más de una compra, son parte de tu base de datos. Sácale provecho y contáctales. Preocúpate por ellos. Muéstrales ofertas de productos que ya han comprado o de nuevos productos. Hay campañas de mailing (https://mailchimp.com) que son muy completas. A cada uno le puedes llamar por su nombre y eso gusta. La redirección a ese mail siempre será tu página web… yuhouuu! Han vuelto. J Tienes otra oportunidad para solidificar esa relación.
honrarás a los clientes fidelizados:
Si ves que alguien te compra semanalmente o mensualmente, agradéceselo. Pero no con un correo electrónico de ¡Gracias!. Dale puntos, descuentos, y pídele un feedback, porque él conoce la tienda mejor que nadie y te importa su opinión. Esa clase de cosas ¿sabes? Tenerle en cuenta. A todos nos gusta que nos tengan en cuenta. A – T O D O S.
Dales su publicación de cada día:
Está ley en inamovible. Jurotelo. Si quieres fidelizar a un cliente y comunicarte bien con él, tienes que mandarle mensajes, recordatorios, agradecimiento… O simplemente los buenos días…. TODOS LOS DÍAS. Al poder ser hazlo de forma original; intenta siempre entretener y divertir a tu cliente. Que se le escape esa sonrisita tonta tras la pantalla. Si le gustas mucho mucho mucho puede que acabe siendo un embajador de tu marca, y eso está en el TOP 1 de clientes, muy por encima de los clientes fidelizados. ¿ por qué? Porque solo con hablar bien de ti, puede atraerte muchos clientes más.
Dejarás que caigan en la tentación:
Cuando entre en tu página web, tienes que ser listo, muy listo. El diseño de esta tiene que ser bonito y muy muy claro. Además, tiene que ser intuitivo y fácil de usar, creando en el usuario una experiencia positiva de compra. Pero sobre todo, tienes que potenciar ese deseo de comprar que hay en todo ser humano. ¿Cómo? Poniendo un botón de llamada a la acción por ejemplo. Como pueden ser los carritos de compra o los anuncios del tipo ”comprar ahora”. Lo que quieras. Pero llama su atención. Una estrategia muy simple pero que funciona bastante es la de “ los clientes también han visto…” o “ top ventas”, así ayudas al cliente a decidirse cuál de todos va a comprar.
Bueno y después de esta breve explicación ¿qué vas hacer? ¿Cómo piensas decirle al cliente lo mucho que le quieres? Os propongo una cosa; en lugar del trabajador del mes, elige al cliente del mes. Ya verás que contento se pone! 😉
Good luck!